Esta mañana, Juan Hernández se reencontró con representantes de la Fiscalía del Distrito Sur de New York –que no ha perdido un caso por narcotráfico– y el juez Kevin Castel, en el marco de la primera audiencia de esta semana de su juicio por tráfico de droga, donde trascendió que la pareja del “Porky”, líder de la “Mara Salvatrucha” (MS-13), testificará en su contra.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. A las 9:51 de esta mañana inició la audiencia en el salón 3-B, lista para empezar el juicio histórico contra el exgobernante hondureño, Juan Orlando Hernández (JOH); se esperaba que de entrada se nombraría el jurado que dictará la sentencia del líder del Partido Nacional, que llegó vestido ante el juez Kevin Castel con el traje que tomó la banda presidencial en enero de 2015 en el estadio “Nacional” de Tegucigalpa.
La sala estaba llena con al menos cien personas; la discusión de los abogados de la defensa con los fiscales que representan la acusación del gobierno estadounidense contra Hernández, era si se aceptaba o no información de última hora que aportaría contra el exmandatario el peligroso criminal internacional “Porky”, alto jefe de la estructura del crimen “MS-13”.- Además, que la novia del “Porky”, de quien no se reveló el nombre, será testigo de la fiscalía para demostrar la participación de JOH en el crimen organizado.
La defensa dijo que no se podía aceptar la testigo ni las evidencias, audios y otras, porque no se conoce, pero la fiscalía afirmó que son co-conspiradores (CC). Las evidencias fueron admitidas por la Corte, lo que se considera una derrota para la defensa de JOH. La novia del Porky es testigo esencial para la acusación, según trascendió entre juristas que analizan el tema en los pasillos del tribunal neoyorquino.
Afuera hay un grupo nutrido de hondureños ha estado pendiente todo este día de los pormenores del juicio, pidiendo justicia para el pueblo hondureño y condena para JOH; en un ambiente exterior, colmado por medios de comunicación internacionales.
Yulan Adonay Archaga Carías, conocido en el ambiente criminal como “Porky” o Alex Mendoza, es “el miembro de más alto rango de la Mara Salvatrucha 13 (MS-13) en Honduras”, según las autoridades estadounidenses. También es uno de los hombres más buscados por el FBI.
EE.UU. ha estado ofreciendo una recompensa de cinco millones de dólares por información del “Porky”, desde que el 13 de febrero de 2020 escapó de los tribunales de El Progreso, Yoro, donde fueron asesinados cuatro policías. Ahora apareció en manos de las autoridades y está dispuesto a narrar los detalles de su relación criminal con el exgobernante hondureño.
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