Las pruebas exponen la participación directa de Juan Orlando Hernández (JOH) en la adquisición de recintos de aislamiento, pero el Ministerio Público parece no saberlo, ahora asegura que el titular de Invest-H, Marco Bográn, actuó solo para sacar de las bóvedas del Gobierno 1,200 millones de lempiras (48 millones de dólares).
Por medio del famoso audio filtrado en julio del año pasado, la secretaria de Finanzas, Rocío Tábora, autoriza la compra de Hospitales a Bográn por órdenes de Juan Hernández, quedó al descubierto que ese acto de corrupción no solo envuelve a tres empleados de Invest-H, es una acción del Gobierno.
También la pedagoga, titular de la Secretaría de Salud, Alba Consuelo Flores, expuso las instrucciones directas del mandatario para que Bográn buscara una empresa que fabricara los fracasados recintos asistenciales para Covid-19.
Redacción/EL LIBERTADOR.
Tegucigalpa. –Un audio de la entonces secretaria de Finanzas (Sefin), Rocío Tábora, y el oficio elaborado por la Secretaría de Salud (Sesal), dirigida por Alba Consuelo Flores, expusieron al mandatario Juan Hernández, quien, según esas pruebas oficiales, ordenó la compra de Hospitales Móviles; operación que terminó en estafa al Estado de Honduras de 1,200 millones de lempiras (casi 48 millones de dólares).
Pero ahora el Ministerio Público (MP) asegura que en ese momento el director de Inversión Estratégica de honduras (Invest-H), Marco Bográn, hizo la adquisición por encima del Gobierno y sin consultar a la máxima autoridad del Ejecutivo, además, que burló al Banco Central de Honduras (BCH) y a la Secretaría de Finanzas para la emisión del pago en 26 minutos de los hospitales móviles al presunto empresario guatemalteco-estadounidense, Axel López.
En julio de 2020, un revelador audio de Tábora a Bográn expuso a los autores intelectuales del desfalco de casi 48 millones de dólares (casi 1,200 millones de lempiras). La responsable de Finanzas, Tábora, en esa grabación explica a Bográn sobre la propuesta que hizo a Juan Hernández, de que Invest-H debía dirigir las compras para contrarrestar la pandemia.
En ese audio informa que Hernández dio el visto bueno y autorizó que Bográn fuera el encargado de las compras, entre éstas la adquisición de los hospitales móviles, ahora denominados “desechos móviles” por el personal sanitario, debido a las condiciones de chatarra en que arribaron solo dos de ellos al Honduras y en general ninguna de las siete estructuras está habilitada para el tratamiento de pacientes Covid-19.
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Claramente, Tábora confirmó la autorización de Hernández, al anunciar: “Buenos días, querido Marco. Mire, acabo de hablar con el presidente. Yo le propuse que todo lo que son insumos, y temas vinculados al tema de Salud, todo, todo, todo, lo compremos a través de Invest y me dijo que sí”.
Y por medio del oficio No. 63-SS-2020 el 16 de marzo de 2020, la pedagoga Alba Consuelo Flores, destaca una prueba más de la culpabilidad de Juan Hernández en el espantoso robo al Estado de Honduras con la excusa de la pandemia.
En el escrito dirigido al Bográn, se solicitó la compra de los hospitales móviles, apuntando: “Como parte de la respuesta a la Emergencia Nacional ante la presencia del Coronavirus (Covid-19) en nuestro país y siguiendo las instrucciones del presidente de la República, con el propósito de apoyar la atención eficiente de las personas ante la ocurrencia de dicha infección, es del interés de la Secretaría de Salud (Sesal), que Invest-Honduras interponga sus buenos oficios para la compra , construcción o adecuación de obras de infraestructura médica provisional”.
Seguidamente, menciona los parámetros de adquisición, donde destacó seleccionar al proveedor idóneo de los hospitales de aislamiento para la atención de los infectados con el coronavirus.
Es así donde Marco Bográn no titubeó para ponerse en contacto con la empresa fachada Elemed Medical Systems, del pseudoempresario Axel López, con quien acordó la fabricación de siete hospitales, todo se solicitó y canceló por medio de mensajes de WhatsApp y correo electrónico, sin firma de ningún contrato de garantía ni de obligación de calidad, reveló hace unos días la investigación del Ministerio Público.
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En julio, una investigación de EL LIBERTADOR, permitió sacar a la luz documentos que demostraron la agilidad de Bográn y otros tres empleados de Invest-H para hacer el mañoso trámite: la especialista financiero Bessy Roxana Rodríguez Mendoza, el contador general, Carlos Luis Guevara Mondragón, y el director administrativo, Alex Alberto Moraes Girón.
En solo 26 minutos y tres segundos los funcionarios ya habían aprobado el primer pago de más de 1,000 millones de lempiras a López, por dos hospitales móviles.
Según establece el documento de compromiso 00365, dicha transacción se consumó el 18 de marzo de 2020 y a las 2:46 de la tarde con 36 segundos, el especialista financiero Rodríguez verificó la información presentada por Elmed Medical Systems, empresa que físicamente nunca existió.
Los autores materiales han sido judicializados, pero queda de nuevo la pregunta que los órganos de justicia sin dan respuesta, ¿qué pasará con los autores intelectuales que han puesto en juego la vida del pueblo? Los verdaderos actores de la corrupción en tiempos de pandemia aún siguen libres, sin ser investigados y dirigiendo, tranquilamente, puestos de administración pública.
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