Hacinados en una bodega, con visibles problemas de deshidratación y con problemas de nerviosismo y ansiedad, más de 700 migrantes fueron rescatados por las autoridades mexicanas en el Estado de Tlaxcala, en el centro de México; 26 de ellos son de nacionalidad hondureña.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Un total de 726 migrantes, que se encontraban amontonados en una bodega sin agua, ni oxígeno, fueron rescatados ayer por las autoridades mexicanas; entre ellos, según reporte del cónsul de Honduras en México, Hector Amador, se encontraban 26 hondureños.
En el rescate se identificaron 75 menores de edad que viajaban solos, también se salvó una niña de ocho meses y mujeres embarazadas. En el operativo se capturó a seis individuos por presunto delito de tráfico de personas. La operación fue desarrollada por autoridades mexicanas.
Las autoridades del estado de Tlaxcala, entre ellos la gobernadora, Lorena Cuellar, ordenaron la asistencia médica de emergencia al identificar migrantes con problemas de deshidratación y crisis nerviosas producto del prolongado encierro.
El operativo surgió luego que la policía local recibiera una llamada por parte de un anónimo, que informó de dos camiones en una bodega abandonada y posteriormente, diferentes personas llegando en vehículos diferentes ingresaron a la infraestructura, lo que dio pie a las autoridades para investigar.
Los migrantes hondureños se encuentran recibiendo atención médica y humanitaria en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración, según información de la cancillería.
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