La próxima semana, entre el martes 22 y miércoles 23 de marzo, ya debe estar lista la resolución de la apelación que presentará la defensa del extraditable Juan Hernández, pues, no hay argumentos técnicos ni jurídicos que puedan detener que el exgobernante vaya a juicio en Estados Unidos, así lo observa el abogado Joaquín Mejía. ¿Y, si ocurriera lo que en privado piensan algunos expertos? Que hay jueces con intención de ayudar a su viejo amigo y benefactor.
Al margen de las conspiraciones, el togado Mejía asegura que la extradición deberá proceder, ya que se cumplen cuatro requisitos para que sea inevitable y, en ese sentido, agrega que “por muy tarde el martes en la tarde él (JOH) debe abordar un avión e irse hasta el centro correccional del Distrito Sur de New York”.
En la gráfica, Hernández aparece reunido con el presidente de la Corte, Rolando Argueta, y el entonces presidente del Congreso, Mauricio Oliva.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Que la silla privada de los magistrados de la más alta corte de justicia de Honduras, haya sido utilizada por el extraditable Juan Orlando Hernández Alvarado para grabar un mensaje en su defensa, “es un escándalo mundial”, ha dicho este día, Mike Vigil, ex director de operaciones internacionales de la agencia estadounidense Administración de Control de Drogas (DEA, siglas en inglés).
Eso es suficiente para que en ambientes judiciales corra la voz que hay interés en la instancia de apelación de denegar la petición de Estados Unidos que ha solicitado la extradición del exgobernante hondureño, a quien acusa de “narcotraficante de alta peligrosidad”, de haber enviado 500 mil kilos de droga y de conspiración violenta armada.
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No obstante, el abogado especialista en derecho constitucional y derechos humanos, Joaquín Mejía, ha explicado que tras la declaratoria del juez Edwin Ortez de extraditar a Hernández, la apelación de los defensores del exgobernante no alterará que éste vaya a juicio al país norteamericano.
El representante legal de Hernández, Félix Ávila, confirmó que presentarán apelación, para ello cuentan con tres días hábiles, es decir que el plazo se vence el próximo lunes.
Ante este contexto, Joaquín Mejía ha dicho a EL LIBERTADOR que los defensores de Hernández presentarán el recurso hasta el próximo lunes, con el objetivo de prolongar lo más que se pueda el deshonroso viaje; no obstante, señala que los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sólo tienen 24 horas para dar una resolución a la apelación”.
“El lunes es el último día para presentar un recurso de apelación ante el juez natural, tomará todo el expediente y se lo envía al pleno de la Corte, ellos inmediatamente tiene que convocar a sesión para tomar una decisión final, ya sea ratificar la extradición o revocarla”, manifiesta Mejía.
Recalca que en otros procesos de extradición no se ha apelado porque únicamente sirve para “perder el tiempo”. “La única razón para que lo hagan el lunes es para que él esté más tiempo con su familia”.
Además, Mejía es enfático al mencionar que, pese a que el Poder Judicial ha sido cómplice de Hernández, sus magistrados no podrán hacer nada para revocar la extradición, pues éstos sólo verificaran si el proceso cumple los requisitos internacionales.
“Los requisitos son una relación jurídica entre ambas naciones, y si hay un convenio y una reforma constitucional que permite la extradición; en segundo lugar, que exista un petición formal y que el acusado permanezca en territorio nacional; finalmente, el otro requisito es que en Honduras no exista un juicio oficial. Todo eso se cumple”, reafirma.
Mejía agrega que: “Ahora la Corte Suprema lo que hará es revisar nuevamente esos requisitos y obviamente todos se cumplen porque en términos técnicos y jurídicos, no hay manera de revertir la extradición”. Por dicha razón, explica que en casos anteriores los abogados han preferido una defensa ya en juicio en Estados Unidos.
Finalmente, asegura que en un máximo de dos días, desde que los magistrados dicten un fallo negando la apelación, se deberá comunicar a la Secretaria de Seguridad y la Cancillería para que en conjunto coordinen con las agencias de seguridad de EE.UU. y se proceda con la extradición.
“Por muy tarde el martes en la tarde él (JOH) debe abordar un avión e irse hasta el centro correccional del Distrito Sur de New York”, concluye.
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