“…nos reservamos el derecho de ejercer las acciones legales que correspondan en aquellos casos que sin conocimiento del marco legal que rige al BCH, se desmerite la imagen institucional y reputación del mismo”.
Wilfredo Cerrato Rodríguez, presidente BCH
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Las compras irregulares de hospitales móviles del Gobierno hondureño a través de Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H) tienen nerviosas a las autoridades del Banco Central de Honduras (BCH). En menos de 24 horas, la máxima autoridad del banco estatal, Wilfredo Cerrato, envió dos misivas amenazantes al analista y economista, Claudio Salgado y al parlamentario del Partido Libertad y Refundación (Libre), Jorge Cálix.
El 3 de julio el economista Claudio Salgado, exsubgerente técnico del BCH, brindó declaraciones a la capitalina Radio Globo, en la que cuestionó el ligero proceder de la institución al hacer la transferencia de fondos para pagar los sobrevalorados hospitales móviles que el director de Invest-H, Marco Bográn adquirió, sin el consentimiento de la junta directiva tal como públicamente han manifestado la mayoría de organismos a través de sus representantes.
Por su parte, el abogado y diputado en el Congreso Nacional por Libre, Jorge Cálix, ha escrito en un mensaje que envió a las redes sociales, que en una parte advierte: “Ahora el Partido Nacional me amenaza con acusarme (otra vez), a través de Wilfredo Cerrato, presidente del BCH por preguntar por qué el BCH le dio 48 millones de dólares para pagar por adelantado hospitales sin garantía de cumplimiento y sin consentimiento del consejo directivo”.
A continuación publicamos las cartas enviadas a Claudio Salgado y Jorge Cálix.
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