Jamás, ¡pero es que era impensado! Nunca los “analistas” del viejo poder que ha vivido de Honduras y saqueado la comida del pueblo, vieron venir en el tiempo un militar rechazando golpes de Estado o atacando la avaricia de los diez clanes. Ni en el futuro más distópico imaginaron que el verde olivo que siempre se les cuadro dócil y sin múrmura, saldría del coma y se rebelaría ¡Y ahora sí!, apunta hacia ese capital libre de impuestos; el sudor se congela en la cara ¡Y ahora sí! Chillan un juicio político para las armas.
Y en esta historia de conspiración, ya no sabemos qué ondas –condenamos siempre, claro que sí–, aunque parece mal guion de una de las parodias de la “Rosa Guadalupe”, las estrellas azules mamadas en expedientes de la Fiscalía y la Corte Suprema, y que descarados éstos majes, pasan inventado un tal “Plan Venezuela” para robar elecciones ¡Disco rayado, bro’! Desde 2009 traen ese discurso para que la gente olvide sus delitos inmortales.
¡Pero que gran escándalo! Nos preocupamos todos porque las Fuerzas Armadas actúan como “militantes” de partido, “¿pero es cierto o no?”, preguntan los constitucionalistas sobre lo que dijo Roosevelt ¡Y, sí, es cierto! desde su nacimiento los verde oliva han sido dóciles y la seguridad del mezquino poder y para el pueblo balas y gas, Aaah pero hoy retumban las palabras mágicas: “El enemigo de la democracia es la oligarquía”, y el mundo tiembla, volvieron sus noches de Melex, saludos manda Rixi.
Reflexión
EL LIBERTADOR
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Tegucigalpa. “La ironía se desperdicia en el estúpido”, citó el escritor girasol, Oscar Wilde. ¡Cuánto te reirías amigo de letras siempre jóvenes en estas honduras! Comenzaba a sentir el viento decembrino y el helado filo de la mentira se mezclaba con esa sensación de nostalgia que nos regala la fecha, el 6 de diciembre el activista –Veeeh ¡perdón!– el señor jefe de las Fuerzas Armadas, René Orlando Ponce, dijo sonriente que la población estaba más que contenta con la reelección de Juan Hernández ¡Brincos dan de felicidad! Seguro pensó el acomodado militar. Pero ¿Garantizar la alternabilidad en el poder no es una de las razones por las que financiamos todos sus juguetes y la pose de ser hombres de armas?; eternamente las Fuerzas Armadas han sido instrumento del poder y cuasi enemigas del pueblo, pero como lo único permanente es el cambio confirma una ley de la ciencia lógica, hoy retumba en el pecho de propios y extranjeros la expresión que huele a hondureño: “El enemigo de la democracia es la oligarquía”, y parece que el mundo tiembla. Irónico, temen a quien tanto los ha cuidado.
Y cae la edad en los huesos de aquel anciano, pide permiso a un pie para poner el otro, en la cabeza ya solo tiene una línea de pelo, busco a ciegas los lentes –ring, ring– suena el celular, este señor, ya no quiere saber de política, el cuerpo reclama descanso pero… tiene un hijo tonto pronazi, la función debe continuar. –Aló. –¡Puta viejo! Levante, te ocupamos en el programa de hoy ¡Andá! Hace mierda esos de Libre ¡Apúrate! –Ya voy Tommy… La llamada ha terminado, la orden ha sido dada, ya la gente se aburre con él, ya murió la energía que caminó hacia la maldad y el ingenio si es que vivió ahí alguna vez, 7 pastillas en el desayuno y 10 en la cena, le recuerda la parca en la otra esquina… Los que alguna vez fueron “tanques de pensamiento” hoy se han oxidado, da ternura ver el asilo que camina a defender las posturas tradicionales (y no estamos hablando de edad, leer un poco de espiritualidad), la confianza que el poder sintió antes de 2009, los llevó a nunca formar relevos y los que hoy quieren vender son… bueno, no funcionan –esta no es una línea clara para gente como Robertito o los raros del CNA–.
Jamás en la telaraña del razonamiento de los “pensadores tradicionales” donde las fotografías aún están en amarillo antiguo con fondo de Carías y su asesino Tomás “Caquita”; buena, ya la expresión en sí forma una contradicción en esos con ideas estreñidas, un enema opaco (busquen para qué sirve, es muy íntimo) les vendría súper genial para fluir a la modernidad del mundo civilizado en el siglo XXI, por eso nunca imaginaron ni en los sueños más distópicos escuchar de la voz de un militar, desde sus instalaciones la expresión “general Hung Pacheco, no a los golpes de Estado, general Isaías Barahona, no a los golpes de Estado, general Romeo Vásquez, no a los golpes de Estado, general Maldonado Galeas, no a los golpes de Estado”. Un colapso surgió, no en la mente de los mencionados, sino en el alma de los maquinadores, desde la avenida “Los Próceres” hasta la colonia Loarque, ahí frente a Ferromax, el pánico invadió las células, por primera vez las palabras de un armado se parecen a lo que dice un intelectual consciente de que ya es hora de terminar la espantosa e infame desigualdad social en Honduras. ¡Vaya jodido! Aunque no lo crean, el mundo “se mueve” y Giordano Bruno lo sostiene, aun en contra de la inquisición, aún con la hoguera encendida, aún con la carne en llamas.
¿Hasta dónde los ha llevado el miedo a ustedes, enemigos de la libertad del país y del pueblo? En esta historia de conspiración que ya parece más la “Rosa de Guadalupe” que una operación psicológica para manipular las masas a través de medios de comunicación, han abierto un nuevo capítulo, ahora se llama “Plan Venezuela”, en la mente vacía de estos personajes recorren las más fantasiosas historias, desde que los comunistas se comen a los niños, hasta que haya que olvidar que el crimen organizado tomó el poder en Honduras hasta volverlo el territorio más violento del planeta; entonces después de querer instalar que “Honduras no sea como Venezuela” y que “la malo de ayer ahora es bueno”, vuelven con la misma obsesión, solo que ahora atrapados y movidos por miedo a perder las fortunas que han amasado de Honduras para llevar vida de magnates en Miami, ésto, los hace perder la lucidez de una buena táctica, una paja creíble.
En una orquesta conjunta, aparece el mismo día, partidos Nacional y Liberal, medios de comunicación tradicionales y parte de la estructura empresarial, aaahhh y una diarrea tóxica de Tiktok por redes sociales, todos salen con camisas blancas, pidiendo lo mismo, hablando de lo mismo “Venezuela, Cuba, Nicaragua” y aunque todos bailan la misma canción, el que la toca no aparece en cámaras “siempre poné atención al que no le guste figurar, al invisible, ese es el peligroso”; entonces piden, con temor, un juicio político para Roosevelt Hernández, no es por lo que dijo, sino por lo que significa que él lo diga: han perdido el control histórico de las Fuerzas Armadas. ¡Buuu! –Nosotros botamos un presidente en tres días si queremos, ja,ja,ja,ja y qué– mientras pumpunean una mesa frente al Altar Q, esa escena comienza a verse como una foto borrosa, sin el apoyo de la bota militar y ahí es justamente donde nace el miedo. A los lejos, una Rixi sobre un “Airbus H145” les provoca insomnio, ansiedad y acidez estomacal.
El “plan Honduras” es obviamente claro, expulsar a Libre del poder, sobre todo, del Ejecutivo, en un país presidencialista es la clave para asaltar como se ha hecho por 200 años el Estado, desde afuera como una posición geoestratégica, desde adentro como una hacienda que permite el dinero para las compras del “Merry Xmas” en La Florida, vivir de Honduras pero no en Honduras es la máxima, los viejos y jóvenes de las diez familias poderosas del país rara vez vienen a Honduras, hablan poco español, residen en el extranjero, aquí es la casa de campo donde vienen a recoger la fantástica producción del huerto que se van a tragar a la ciudad (Estados Unidos). Por eso vivimos en un prueba y error permanente, cuadros nuevos aparecen y otros se esconden, es un momento de confusión en el poder, donde una gorra blanca, no será suficiente. “Hermanos, amanece y Morazán vigila”. Avanti
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