Una fotografía que ilustra un ambiente nevado en la frontera occidental entre Honduras y El Salvador se ha convertido en viral en las últimas horas, sin embargo, esto no se ha podido confirmar ni en los medios salvadoreños ni con las autoridades hondureñas la veracidad o mala interpretación del fenómeno climático.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. La fotografía que circula por las redes en Honduras muestra el terreno blanco de aparente nieve que cayó en las montañas de El Pital, Nueva Ocotepeque, occidente de Honduras, sin embargo, EL LIBERTADOR confirmó que la gráfica publicada en este noticia pertenece al sitio Wikipedia y el hecho ocurrió hace algunos años.
La Reserva Biológica El Pital asentando en la comunidad El Pinal, es una cadena de montañas transnacionales ubicadas a 13 kilómetros al Noreste del casco urbano de San Ignacio, municipio salvadoreño, y a 7 km al Sureste de la ciudad hondureña de Nueva Ocotepeque.
Es de impresionantes laderas escarpadas, con 2,730 metros sobre el nivel del mar (msnm) es el más alto de El Salvador y el tercero más alto de Honduras. Su área total, incluyendo la zona de amortiguamiento, se estima en 38 km con más de un 50 por ciento de su bosque original ya destruido.
El Pital es considerado, por las personas que gustan del clima frío, uno de los mejores lugares para poder acampar.
Según los hondureños especialistas en meteorología, esa zona en épocas como la presente cuando el país está afectado por frentes fríos suele generar temperaturas mínimas de cinco grados centígrados, pero se perciben como si fueran tres grados por los fuertes vientos gélidos, lo que genera una densa capa de neblina al ras del suelo que visto desde lejos se aprecia como una planicie blanca.
Una de las condiciones básicas para que haya nieve es que la temperatura baje a cero grados centígrados, y los especialistas explican que ese descenso todavía no se ha registrado en Honduras.
El sábado 10 de abril del 2004 se registró una tormenta fuera de lo normal que sorprendió a los turistas y hasta los mismos habitantes de la zona.
El día amaneció soleado, pero por la tarde la neblina empezó a subir y la temperatura bajó considerablemente hasta que empezó a llover.
El agua duró unos pocos minutos, luego las gotas se convirtieron en granizo.
Esta granizada duró alrededor de una hora, esto fue suficiente para formar una capa de escarcha blanca de por lo menos unos cuatro centímetros, dando un aspecto de nieve.
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