Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Varios diputados del Parlamento recibieron dinero de la Organización no Gubernamental “Asociación Nacional de Productores de Barrios e Industriales de Honduras (ANPBIH)” utilizados para neutralizar conciencias.
Este extremo fue revelado hoy por el director de Radio Tv Globo, David Romero, ya que varios congresistas, en particular tránsfugas del partido Libertad y Refundación, fueron beneficiados con fuertes sumas de dinero para que apoyaran iniciativas del oficialismo.
Los sindicados son Héctor Padilla, Audelia Rodríguez de la Democracia Cristiana, recibieron varios cheques con cantidades de dinero provenientes de la organización. Padilla fue el parlamentario que votó a favor de incorporar en la Constitución la denominada Policía Militar y fue impedido por la oposición.
Padilla, conocido por ser uno de los diputados más improductivos en el Congreso, se salió de la bancada de Libre, recibió el 22 de diciembre de 2015 dos cheques, emitidos por el banco Davivienda por 89,820 lempiras y un segundo cuyo monto no fue revelado
Rodríguez Rodríguez, salió electa diputada por Libre en representación de Atlántida, pero se marchó del partido alegando ser marginada por el jefe de bancada Manuel Zelaya y porque “por ser pobre no era bienvenida”.
La diputada disidente recibió dos cheques que suman casi 240 mil lempiras; en la misma fecha que se libró el cheque de Padilla, Rodríguez recibió dos desembolsos por 119,760 lempiras.
Todos los diputados que recibieron tales desembolsos, fueron miembros de Libre, que desertaron a inicios de 2015, luego que desobedecieran líneas de partido, al votar en contra de leyes que a juicio de Libre, son atentatorios contra la sociedad.
El primero en largarse fue Eduardo Coto, quién denunció ser “marginado” y de tener diferencias con Zelaya. Luego, Tatiana Canales, se marchó alegando que el “ala dura” de Libre la cuestionaba por sus posturas pro oficialistas.
Cuando Canales salió de Libre, le siguieron Jenny Murillo por Cortés, José Rodríguez de Copán y el suplente Marciano Alvarado. Todos forman parte del colectivo independiente, muy afín a las líneas del Partido Nacional.
De hecho, votaron en secreto por la planilla impuesta por el oficialismo para beneficiar a candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia hondureña, la mayoría con fuertes nexos con el presidente Juan Hernández.
Al respecto, Romero denunció que estos diputados resultaron beneficiados con los recursos provenientes de la ANPBIH, de origen dudoso. Y es que documentación interceptada por el comunicador apunta a José Napoleón Panchamé –quien habría falsificado el título de abogado– cooptó a los directivos de la asociación para que permitieran el tránsito de capitales, con la promesa que serían ayudados, hecho que nunca ocurrió.
Panchamé –añadió– recibió recursos de hasta 700 mil lempiras, ya que firmó para sí mismo un cheque y fue cobrado en la entidad bancaria.
Informó que los miembros de la ONG fueron engañados a fin que proporcionaran documentos para la gestión de proyectos, procedentes del Fondo de Seguridad Poblacional, más conocido como el “Tazón”, Agencia de Obras Sociales del gobierno hondureño y una aportación del tres por ciento del Impuesto Sobre Ventas (ISV), a fin que pudieran realizar obras de beneficio para los asociados.
El periodista sostiene que se captaron recursos estatales por unos 50 millones de lempiras, que sirvieron para emitir cheques con fuertes sumas de dinero a diputados afines al Partido Nacional; parlamentarios liberales y del Partido Anticorrupción (Pac) también fueron beneficiados.
A la lista se suma el congresista de Libre por Santa Bárbara, Denis Sánchez Fernández y Augusto Cruz Asensio, quienes admitieron haber recibido fondos de la Asociación de Productores y se contradijeron al explicar por qué recibieron altas cantidades de dinero y qué trabajos realizaron para merecer tal beneficio.
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