CRISTIANOS NO PARTICIPARÁN EN MARCHAS DE «IGLESIAS» DEL GOLPISMO Y NARCODICTADURA

La Asociación de Iglesias Evangélicas Centroamericanas se deslinda de movilizaciones organizadas por la Confraternidad Evangélica y la Iglesia Católica y argumentan que ambas organizaciones operan bajo intereses políticos desde gobiernos pasados.

Redacción Central / EL LIBERTADOR

Tegucigalpa. La Asociación de Iglesias Evangélicas Centroamericanas de Honduras (ASIECAH) informó que no participará en la manifestación pública organizada por la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) y la Iglesia Católica, al considerar que la movilización responde a intereses políticos y no espirituales.

En el comunicado fechado el 28 de julio, ASIECAH expresó que ambas organizaciones –la CEH y la Iglesia Católica– han optado por posturas partidarias durante los últimos gobiernos.

La asociación reiteró su carácter apolítico y señaló que no puede alinearse con movimientos políticos que desvían su misión de predicar el evangelio.

“Tomar una postura política nos quita la autoridad espiritual para seguir predicando en nuestro territorio”, advirtió el documento firmado por el presidente del organismo, Aris Oriel Martínez.

Asimismo, ASIECAH sostuvo que las protestas sociales no tienen un fundamento bíblico y que su responsabilidad como iglesia es transformar el corazón humano y predicar la palabra de Dios; en ese sentido, reiteraron que su mayor parte a la nación es formar discípulos, más allá de las coyunturas políticas.

Finalmente, afirmaron que su compromiso es orar por Honduras y por un gobierno que fortalezca la familia, la educación, la salud y el desarrollo integral.

Iglesias corrompidas
Predicar el evangelio no ha sido el único fin de la iglesia a lo largo de la historia.

En trabajos publicados por este rotativo, se ha expuesto cómo —según historiador—, durante la Guerra Fría, conflicto que se suscitó en la segunda mitad del siglo XX, la Iglesia evangélica fue utilizada por la CIA para desestabilizar gobiernos progresistas y los movimientos populares de la época en América Latina.

Con el tiempo, en Honduras los grupos religiosos fueron alineándose con los sectores más conservadores y privilegiados del país, desde la Conferencia Episcopal, que validó el golpe de Estado de 2009 y guardó silencio con las atrocidades de la narcodictadura de Juan Orlando Hernández (2014-2024).

Y hoy vuelven a su papel desestabilizador que ha tenido como protagonistas a prelados como Michael Lenihan, arzobispo de San Pedro Sula, y al propio cardenal Oscar Rodríguez.

Además, por parte de la iglesia protestante, la Confraternidad Evangélica (CEH) fue cercana al régimen narcodictatorial de Hernández, pues uno de sus líderes, el pastor Alberto Solorzano, fue señalado por haber sido benefactor de “ayudas” de la narcodictadura.

Incluso, pastores como Evelio Reyes, líder de la iglesia Vida Abundante, apoyó abertamente tanto al dictador Roberto Micheletti como al hoy convicto Juan Hernández, además de integrar la “Honduras por la democracia”, organización en oposición al actual Gobierno.

Otro líder evangélico abiertamente seguidor de Hernández es Roy Santos, quien además de bendecir la narcodictadura, hoy es criticó del Gobierno afirmando, incluso, que Dios le ha hablado para difundir un mensaje a favor del narcotraficante.

Desde que la Fiscalía de Estados Unidos comenzó investigaciones contra Hernández, en Honduras fallecieron miles de hondureños, la pobreza y la desigualdad crecieron y, por más que la Biblia predica un mensaje de compasión, ni la CEH ni la Iglesia católica retaron la narcodictadura.

Caso diferente hoy, con el gobierno de Xiomara Castro, cuyo modelo apegado a políticas sociales importantes, como la justicia tributaria que pretende obligar a los más ricos a pagar impuestos, ha despertado la oposición de los grupos religiosos conservadores.

En ese sentido, la ASIECAH cerró su comunicado acotando que, aunque no comparten posturas con algunas políticas del actual Gobierno, entienden que su papel es la predica del evangelio con el fin de que las personas —incluidos funcionarios— conozcan a profundidad la enseñanza bíblica.

“Creemos que nuestro propósito es orar por las próximas elecciones generales en nuestro país para que Dios nos dé un gobierno conforme a sus ideales […] Uniremos esfuerzos con otras iglesias afines en doctrina y en práctica para fines evangelísticos”, concluye el comunicado.

Deja un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

error: Contenido Protegido