Cossette, Batson, Juanchis y la excubana y supuesta “gringa” Salazar, son de raza carroñera y fabricación defectuosa, ni modo, la psicología confirma que hay gente que ya nace en el lodo.- Es tu turno Ana Paola y tenés tiempo, o seguís las líneas dictadas por tu “compa” en CNE o te ceñís al mandato del pueblo, la visión demencial de pocos no puede anteponerse al anhelo de millones. Es 2025 y en Hibueras ya no aguantamos paja de fraudes o golpes.
La realidad nacional emula un teatro o circo, ¿farsa, drama, comedia o tragedia? Cada dos días se inaugura nuevas obras: puentes (fuertes), carreteras, escuelas reparadas y otras “buenas nuevas”, pero la gente embrutecida con noticias falsas duras y puras, repite “fracaso”, un mal Gobierno, todo porque los telarañosas cabezas de los viejos y viejas vividoras de la riqueza del hondureño se excitan porque los fusiles dejaron claro “nunca más” y quieren que en nuestra tierra mande el “gringo”.
Ana Paola, en 2021 fuiste del tridente de los “héroes”, no queremos pensar que estuviste de “paraca” seis años, ya de inútiles este pueblo está a verga… Y, a propósito, se viene otra vez el escuadrón del bótox, encienden las velas (aunque en su locura ven antorchas), claman esclavitud a cambio de visa, dicen pelear por todos pero ven con desprecio al cuidacarros en San Martín.
Reflexión
EL LIBERTADOR
redaccion@ellibertador.hn
Tegucigalpa. En el teatro cósmico de nuestra realidad nacional, dependiendo el género dramático, de cuando en cuando saltan a las tablas actores con el guion totalmente extraviado, algunos son los ridículos del escenario, suben y se dejan llevar por las estupideces de las viejas que se creen adolescentes y ponen a los viejos bufones a bailar en tiktoks, mitad divertido y complemento de vergüenza; otros llegan a creerse los “salvadores” o “los moisés” del país en sus confusos cerebros desérticos de humildad o compromiso social, para ellos es lo mismo bailar en pantaloncillos que gobernar, y este escenario que puede llamarse “mediocracia” (el poder de los mediocres) lo dibuja de manera brillante Enrique Santos Discépolo, compositor, músico, dramaturgo y cineasta argentino. Dice en “Cambalache”, como narrando el viejo acto hondureño: “Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor, ignorante, sabio, chorro, generoso, estafador. Todo es igual, nada es mejor. Lo mismo un burro que un gran profesor”
En esta perdición, en este descontrol: “No hay aplazados, ni escalafón. Los inmorales nos han igualado, si uno vive en la impostura y otro roba en su ambición. Da lo mismo que si es cura colchonero, rey de bastos, caradura o polizón. Que falta de respeto, que atropello a la razón, cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón…” y por ahí va el canto, ja,ja,ja. ¡Increíble! A otros los empolvan por la mañana y los tiran al ruedo para vomitar hiel frente a frente, un laberinto sin salida, cualquier cosa es periodismo para estos carniceros del engaño y del cinismo; todos tienen un lugar en el teatro de Hesse, donde el precio es la razón, “esta noche a partir de las cuatro”.
Nos falta precisar si esto que sufrimos los hondureño como sociedad o nación ¿qué es en verdad? ¿Si esto es una invocación metafísica, satánica, un aquelarre, la reunión de un grupo de brujas alrededor del diablo, encarnado en un macho cabrío? O, exactamente ¿Qué género dramático del teatro estamos pagando con nuestras vidas y nuestro sudor de siglos, será una obra de drama, una tragedia, o quizá comedia, o tal vez una farsa, podría ser tragicomedia o un melodrama?
Ahí vieron esta semana aparecer desde la negra grieta, a un horrible zombi gigantesco de ropa blanca y color verdoso, colgado de cadenas con garfios y rodeado de grandes moscas que al contacto producen envenenamiento. En el bestiario la descripción lo refiere como Evelio Reyes, el «Señor de las moscas».
En esta función de cine retro, en blanco y negro, con actores y actrices que nadie conoce, unos viejos y viejas tan arrugadas y llenas de cremas la cara, donde no ayuda ni el bótox, ahí van las camisetas blancas por las noches, según ellos, salen a respaldar el histrionismo y contradicciones de Cossette frente al CNE: contratar buses para sacar a pasear las maletas electores; incluso vuelven sacar del cajón a Luz Ernestina liderando el “colectivo Lomas del Guijarro” –vaya “escuadron insurreccional”–, que aboga por bótox de calidad, público y gratuito; los medios tradicionales ahogándose en sus propias “Fake News”, tanto mundo imaginario y falso choca en los dedos en los teclados y en la puerta del psiquiatra ¿Dónde habíamos visto un escenario como este? Luego aparece la gusanera chillando como ratas en celo saltando basureros, la metida de Salazar que le prometió a los suyos no ser deportados y fueron los primeros, pero extraño ¡está ocupada con Cossette en Honduras! ¿Y ese contrato quién lo pagará?; Marco Rubio ye entendió de eso en el pasado ¿Se acuerdan? Mismo discurso, hasta los mismos actores. Con la enorme diferencia, que no sienten a los militares de su lado y eso los hace violentos. En el alfabeto del aquelarre se llaman “golpistas”, seres sedientos de sangre inocente; son vampiros tóxicos, se chupan las más alegres emociones de los pueblos y, como lechuzas, les sale un hilo del pico por donde tragan sin tregua las riquezas de la población hasta condenarlos a desgraciados de la tierra.
¿Cuánto cuesta mover a las camisetas blancas? ¿Y eso quién lo paga? –antes era fácil, estaba la caja chica “Vida Mejor” para mover cincuentapeseros–. Aparece Cossette desde un balcón, llorando, tomando su papel actor de María Antonieta en Versalles, gozando como la pobrería aún la alababa, aunque ella estuviera tirada a la perdición del cerebro vacío, sin cumplir su rol de reina y prefiriendo jugar las cartas, embriagarse y entre otros menesteres en el “Petit Trianon”; pero como el mundo de los excesos siempre cobra una factura, Cossette debería recordar que cuando uno abandona sus obligaciones, antes de cerrar los ojos ha caído la guillotina sin saberlo, aún se escucha en el palacio las risas de nuestra querida reina desobligada, aun se oyen en la Bastilla los pasos de la reina sin cabeza.
Quienes controlan el poder nos han llevado hoy a una paradoja, algo como la “Historia de dos ciudades” de Charles Dickens, miramos inauguraciones a diario, puentes, escuelas, canchas, subsidios a viviendas, combustibles, energía, dice el doctor Hugo Noé Pino, que jamás en su vida vio tantos presidentes visitando nuestro país, en el contexto de la Cumbre de la CELAC, lo que nos lleva al prestigio internacional, adonde jamás llegó el mejor actor catracho de la tragedia, Juanchis, ahora entre los más altos top en su vecindario allá en la “Montaña del Sufrimiento”; sin embargo, los medios tradicionales nos hablan de caos, todos los días TVC pone a llorar una viejita en el IHSS, pero no nos cuenta de la gran estafa que hicieron sus clientes, y el “despertar de los muertos” saca a la luz a la “escritora” Marcia, el congelado Jorge Yllescas, al pobre Marlon Lara, hasta “el chino” volvió a salir, esa gente es como pantalón sacado del fondo de la canasta de la ropa sucia, gente como el enanito frustrado de El Heraldo –que nunca valió nada–, pero estos otros seres, son como las gárgolas que solo bajo la sombra de la noche despiertan de su ultratumba ¿Verdad Evelio? Los malos irán al infierno.
“Eran los mejores tiempos, eran los peores tiempos, era el siglo de la locura, era el siglo de la razón, era la edad de la fe, era la edad de la incredulidad, era la época de la luz, era la época de las tinieblas, era la primavera de la esperanza, era el invierno de la desesperación, lo teníamos todo, no teníamos nada”. Es justamente esta demencial visión de ese grupúsculo —pequeño, pero perverso, pequeño pero grita por los parlantes de todos los medios de propaganda, pequeños y grandes enemigos de la paz y dignidad de Honduras— Todos los días son las mismas fuentes de opinión en sus televisoras, ese grupo, algunos tontos y tontas útiles, pero son mulas de vividoras, ese grupo está loco por volver a sentir el yugo gringo en el lomo, jejeje, también “fondos verdes”, lo cierto es que sienten como que les falta algo sino tienen la humillación de esclavos, que les den órdenes, así como insignificante Ricardo que aparece cada tanto después de las agüevadas que le dio Juanchis, ahora habla de “tomar un traguito”, en la pirámide del desprestigio y la vergüenza, son el ladrillo más alto, dejate de pajas “Ricky” querés más billete público. Eeeey, “Ricky”, no hallan en la alcaldía los 1,200 millones de tu Trans.
Ana Paola es la verdadera gema de la obra en el teatro cósmico ¿Qué harás amiguita? ¿Vas a continuar con el plan de los que ordenan y mandan a Cossette o vas a tener un comportamiento honroso como en las elecciones pasadas? Las presiones que esta pobre alma carga desde ya son tan innumerables como los pecados de Cossette, solo tené cuidado Ana, no sabes cuáles son los reales intereses que tiene esa señora y siempre mirá los espejos, esperamos que no seas de esas mujeres que le gusta el sufrimiento, te lo digo como consejo y no como los que da el oráculo montuno de Renato que después queda llorando, Ana, amiguita mía, solo no quiero verte en un año en un montarral bailando tiktoks con Romeo, hacé bien tu trabajo, te ha dado, diría, un prestigio y una buena vida estos seis años, ahora solo queda la prueba final. ¡Mija! ya a esa edad uno no está para que lo exhiban por delincuente como Roció Tabora, con la boca abierta allá en el Barrio “Los Dolores”. Ana Paola, ahí se pierde todo el orgullo, lo sensual y las lágrimas joden el más caro maquillaje femenino, de mujeres chic como vos, Dior Beauty, Charlotte Tilbury, Clé de Peau Beauté, Chanel Makeup, Victoria Beckham Beauty, Gucci Beauty. No vayás a perder ese glamour por pararle bola a las pendejadas de los enemigos del pueblo.
Pensalo amiga, te lo digo con amor. Bye Paola. Avanti
Lea aquí EL LIBERTADOR, edición mensual
Deja un Comentario