En el marco de inauguración de un proyecto de transformación del Centro de Educación Álvaro Contreras en Río Tinto, Atlántida, la presidenta Xiomara Castro destacó que su Gobierno ha ejecutado obras en al menos 3,000 escuelas y colegios.
Datos de la Secretaría de Educación, perfilan que entre 2022 y 2023, sólo en los departamentos de Ocotepeque, Intibucá, Lempira y Gracias a Dios, se han intervenido aproximadamente 570 Centros Educativos para remodelación o reconstrucción.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. La presidenta de la República, Xiomara Castro, inauguró este jueves un proyecto de transformación del Centro de Educación Básica Álvaro Contreras en la comunidad garífuna de Río Tinto, en Tela, Atlántida, sumando así al menos 3,000 centros de estudio intervenidos con obras.
“Estamos haciendo un gran esfuerzo, la inversión pública que estamos haciendo en mi Gobierno es histórica, siendo invertidos para el pueblo y por el pueblo”, declaró la mandataria.
Castro también destacó que, además de las mejoras en la educación, su administración ha dado prioridad a la construcción de ocho hospitales y cinco centros neonatales, con el fin de cumplirle a la sociedad hondureña.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Educación, entre 2022 y 2023, ha intervenido en la reconstrucción de aproximadamente 570 escuelas en los departamentos de Ocotepeque, Gracias a Dios, Intibucá y Lempira.
Asimismo, la presidenta Castro enfatizó que un total de 3,000 escuelas en todo el país se han intervenido (entre reparaciones y construcciones), con el objetivo de asegurar que todos los niños, independientemente de sus recursos, tengan acceso a una educación digna y de calidad.
Además, en el evento, la mandataria abordó la problemática ambiental del país, se discutió el proyecto “emergencia ambiental” que contempla sanciones para aquellos que realicen actividades de tala ilegal y con esto, tener cero deforestaciones para el año 2029, que afecta pueblos indígenas y afrodescendientes.
También se habló de la necesidad de proteger las reservas naturales como Tawahka, la Mosquitia, el Parque Nacional Patuca y la Biosfera del Río Plátano, donde ya se han perdido 210 mil hectáreas de bosque.
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