El “Condor” no fue nunca una simple operación de balas, asesinato de sueños populares y de militares traidores, ha sido la imposición de un estilo de vida que nos condena a la esclavitud, la violencia, la ignorancia, la miseria, la tristeza, los golpes de Estado, dictadores y a permanente inestabilidad; es espantoso escuchar sollozos de hijos indeseados que condenan la autodeterminación del Gobierno que condena la injerencia de Dogu y, al mismo tiempo, creen que “Hibueras” no les importa.
La gusanera miamense ahí en la “pequeña Habana” tiene su propia tribuna electoral para Venezuela, su candidato Edmundo González fue forjado entre barras y estrellas, y es la pieza que busca extinguir la nobleza del “chavismo” una que llevó dignidad, educación, vivienda y cultura a los pobres. ¡Error de Hugo Chávez! Que como Bolivar buscó la felicidad de su pueblo.
Ni un rastrero y destructor de un pueblo como JOH importó tanto como Maduro en Venezuela a los “cheles norteños” y a sus medios hondureños, la maquinaria mediática de todo el continente –de subordinados U.S.– ha estado y estará contra un país, “por ignorancia nos dominaron más que por la fuerza”; es 2024 y los imperiales aún están horrorizados por la cabeza rodante de María Antonieta, ¿vio a Felipe?- A propósito de la Revolución Francesa y los juegos olímpicos.
Reflexión
EL LIBERTADOR
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Tegucigalpa. ¡La culta Francia despierta! Una cabeza, que no es cualquiera, yace en sus propios brazos, vestido hermoso de realeza cubierto de sangre y piel pálida; tomaba vinagre para verse distinta a las francesas campesinas, del vulgo y enormes joyas lucían sus manos. Que bella es aquella mujer, lástima esté decapitada. No, no estamos hablando de la revolución francesa, sino de la inauguración en París de los Juegos Olímpicos 2024, donde la banda de metal Gojira y la cantante de ópera Marina Viotti, “Ah, ça ira” expresaron un llamado a la libertad y la lucha contra el despotismo aristocrático y como un recordatorio a los tiranos de hoy, que “todo caminará”. Jamás la soberbia monarquía imaginó que hoy serviría de ejemplo para otros que se sienten dueños de la voluntad de otras naciones, la historia les da la razón: “solo el pueblo es eterno”, la irracionalidad del poder envenena, nubla los ojos. Hasta que una guillotina cae sobre tu cabeza. “Ah! ça ira, ça ira, ça ira, Les aristocrates à la lanterne! Ah! ça ira, ça ira, ça ira, Les aristocrates on les pendra!”.
La aristocracia francesa creyó en la eternidad de su reinado, así piensan todos los poderosos, que jamás caerán, olvidando mirar hacia Roma ¿Cómo no? Si fue dueña de todo, y todo es todo, hasta la vida de la gente que habitaba los reinos de su linaje, Austria y Francia, de todas las tierras, el pan, la riqueza y los recursos; así la tiranía se formó, la división de clases aumentó, entre ellos y nosotros, hasta que un día la cuerda no aguantó más y el oprimido supo que era mayoría, que el filo estaba en sus manos y dejó caer la hoja sobre el suave cuello de los nobles. Así Estados Unidos ha dominado y destruido estos territorios, pocos hombres y mujeres se han levantado, por supuesto que los han asesinado, el robo de los recursos y cerebros del “Condor”, éste, no fue solo una operación militar e ideológica, se instaló un estilo de vida, la manera en que debe verse el mundo y el mundo es la obediencia humillada a Washington, no hay amistad, nunca existió, hay sometimiento o golpes y muerte. Este es el premio: nacimos y morimos como infrahumanos, esclavos, endeudados y tristes. La modernidad y la dignidad la reservan para ellos, obvio, para controlarnos fácil imponen atraso y más retraso.
Las oligarquías de cada país (si no son nacionales mejor), son apenas parlantes tontos, cajas de resonancia de los intereses estadounidenses ¿A ellos qué les preocupa el hondureño? El hondureño del pueblo les vale mil hectáreas de verga. Les permiten un enriquecimiento criminal, frente a una miseria espantosa que al final es buen resultado para sumisión social, mantienen a los pueblos bajo un régimen de hambre, enfermedad y estupidez, pues es más fácil que así sean amigos del enemigo y enemigos del amigo; ese sector parasitario es el dueño de los medios de producción, así que por sus fábricas pasan los alimentos, los empleos, hasta el agua y la vida como en el Covid, en los hospitales privados las salas UCI era para ellos. Son dueños de los gobiernos y de diputados, así que tienen el presupuesto y las leyes; ellos son el aparato ideológico, así que tienen iglesia y medios de comunicación. Lo único que no les pertenece son las fuerzas de represión, estos tienen un cordón umbilical directo con el departamento de Estado y el Pentágono, y eso les viene a recordar la doñita chelita que pasa pidiendo guerras en América Latina contra los que no quieren “democracia gringa”.
Como un enorme tejido de feroces raíces carnívoras, conectadas a la matriz en Washington, todos los medios de comunicación tradicionales empolvan sus arlequines y pintan sus marionetas para que apunten contra el Gobierno de Venezuela, sin sentir en sus caras regordetas ningún rubor de vergüenza del horrendo cagadal social en que han sumido a los habitantes de sus feudos, saben perfectamente que la derecha internacional hace prueba y error, si logran que el chavismo caiga, será un modelo de exportación para todos los gobiernos progresistas y, si no pueden, sacarán el “project management” y anotarán las lecciones aprendidas; Honduras es un claro ejemplo, la orquesta de gánsteres del poder dejó clarito su bando y su inclinación amoral, ocultaron de sus foros y de sus cámaras a un tipo que estuvo en el Altar Q por ocho años y cuatro en el Congreso, que finalmente su propio amo, Estados Unidos, lo mandó a la guillotina, lo declaró culpable por el delito de narcotráfico, y su sentencia y condena, no importó tanto como Maduro en Venezuela, ni a sus periodistas estrellas serias de la mañana, ni a sus vacías madames que en nada se parecen a la geisha “Butterfly”, que fiel a su honor prefirió perder todo, hasta sufrir el abandono de su marido, Pinkerton.
Hasta la gusanera que como organismo patógeno ha infestado Miami, la pequeña Habana, tiene listo un sistema de computo y registro de las elecciones en Venezuela, contratados los Call Center y todos los emporios informativos de cada país, listos para declarar a Edmundo González (Corina) antes de que sean las elecciones, es más, ya tienen los afiches de que ganarán “contundentemente”; además, “Mundo” es el cuadro perfecto ¿Dónde estudió? ¡Siii! En los EE.UU., ¿Dónde fue embajador? ¡Siiii! En los EE.UU.; ¿Qué país lo apoya? ¡Siii! Los Estados Unidos. Imagino lector, que esto para usted es una enorme sorpresa, jamás lo hubiéramos imaginado. Estamos viendo desnuda como siempre por su trabajo, toda la maquinaría mediática del continente en contra de un país, un pueblo y un Gobierno. Donde lo que menos importan, son las elecciones.
¿Tiene alguna duda del pensamiento articulado entre los extranjeros y los nacionales, más sus vínculos con los medios de comunicación? El tontuelo del diputado del Partido Nacional “Nelson M”, en su enorme verborrea dijo algo interesante, qué Alice desde su puesto en la ONU ha jugado a ser una viejita chismosa, que filtró información confidencial entre el Gobierno de Honduras y el organismo internacional a los medios de comunicación tradicionales y esto sirvió para darle vida a una matriz de comunicación en la guerra Proxy “La CICIH no va a venir”, “Xiomara no cumple”; amigo lector, vuelva a leer el párrafo, por favor y busque en Internet ¿Cuál es la importancia del prestigio de la ONU? ¿Cuál es el verdadero rol de Alice? ¿Debería ser expulsada del país? Honestamente, desde cualquier democracia que se respeta, sí. Pero más importante, así se mueven las matrices del poder, todos ya piensan: si cae Maduro, cae Xiomara y, aquí, el proyecto ya está en desarrollo ya días y ahora van calentando el lenguaje y las reuniones y capacitaciones secretas de sus agencias subversivas que son un faro de conspiración mediante periodistas “demócratas” del patio.
A Estados Unidos, no le molestaron realmente los insultos de Hugo Chávez, el problema fue cuando le prohibió tomar los recursos de Venezuela a su antojo y gratuitos lo había hecho por tiempos y tiempos con la venia de gobiernos corruptos al gusto del norte, je,je,je. Cuando Chávez habló de patriotismo, independencia y justicia latinoamericana; cuando Chávez dijo, hay que darles educación, salud, vivienda y cultura a los pobres; cuando Chávez prefirió ser un nacionalista por filosofía y convicción libertaria bolivariana, que un bastardo gringuero como los que hacen fila para joder Honduras y su pueblo. Ahí se molestó el imperio y sigue molesto.
«Ah! ça ira, ça ira, ça ira, Les aristocrates à la lanterne! Ah! ça ira, ça ira, ça ira, Les aristocrates on les pendra!». Gritó Francia entonces, gritará entonces Venezuela. Avanti.
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