Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. El presidente Porfirio Lobo Sosa (2010-2014), ha manifestado ante medios de comunicación que no cree que el ataque mortal perpetuado esta madrugada, donde su hijo Said Lobo Bonilla perdió la vida, fuera dirigido de forma específica a él, pues considera que los ejecutores bajaron a las cuatro víctimas que se transportaban en dos vehículos. No obstante, el exmandatario ha señalado que el crimen fue perpetrado por sujetos entrenados: “Lo que sí se vio en este asesinato es que son gente bien entrenada en temas de seguridad, no son novatos”. En medio de la consternación, Lobo Sosa no quiso especular sobre quienes ordenaron y perpetraron el crimen, pidiendo a las autoridades que den respuesta: “Es necesario que se ponga orden, no todo lo de ayer es malo, hay cosas que se hacían correctamente y hay que retomarlas”.
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