Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Ana Paola Hall y Cossette López, representantes del bipartidismo en el Consejo Nacional Electoral (CNE), promueven el crimen electoral con la oficialización de la declaratoria de triunfo a nivel presidencial del candidato nacionalista, Nasry Asfura, con la controversial Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), y a pesar de que el escrutinio especial aún no termina, como apunta la ley, y teniendo aún seis días para revisar anomalías.
En tanto, el consejero Marlon Ochoa explica que una declaratoria sin agotar todos los procesos administrativos, es un delito penal, sobre todo porque la sociedad exige un conteo “voto por voto”; las denuncias ya en poder de la Fiscalía frente a un nuevo golpe electoral.
Esta mañana, en vísperas de Navidad, la prensa tradicional ha destacado que el candidato nacionalista, Nasry Asfura, es el ganador de la contienda, aunque oficialmente la declaratoria aún no ha sido emitida y, según lo manifestado por Ochoa, no será firmada por todo el pleno, pues él mantiene su denuncia al fraude.
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