ASPIRANTE DEL PINU SE SUMA A DENUNCIAR FRAUDE Y CONTEO VOTO POR VOTO

A una semana de haberse celebrado las elecciones generales, el presidenciable Nelson Ávila denunció ante la Fiscalía un presunto fraude en el proceso y pidió que se investigue a profundidad cada irregularidad en las Juntas Receptoras de Votos (JRV), advirtiendo que el país necesita certeza y transparencia.

Redacción Central / EL LIBERTADOR

Tegucigalpa. El candidato presidencial del Partido Innovación y Unidad Social Demócrata (PINU-SD), Nelson Ávila, presentó este lunes una denuncia formal ante la Unidad de Delitos Electorales del Ministerio Público (MP) contra varias Juntas Receptoras de Votos (JRV), señalando presuntas irregularidades ocurridas durante las elecciones generales.

El presidenciable exigió un conteo voto por voto y una verificación completa de las actas electorales. Manifestó que el conteo solicitado debe incluir una revisión estricta para confirmar que la cantidad de votos consignados en las actas coincida con el número real de votantes en cada mesa, además de verificar que el acta analizada sea la misma que fue firmada en cada JRV durante la jornada electoral.

El aspirante presidencial afirmó que en el proceso electoral se cometió un “fraude sistémico y sistemático, tanto virtual como físico”, asegurando que existe un patrón numérico repetitivo en los resultados preliminares divulgados por la empresa ASD, encargada de transmitir los datos oficiales.

“Hay una manipulación del código fuente del sistema operativo y así es como se pretende imponer. Deben respetar la voluntad popular; no es la que pretenden imponer algunos, porque realmente con eso están violentando las bases de la democracia y de la libertad. Dijimos que queríamos elecciones honestas, libres —¿cierto?— y democráticas. Demostrémoslo”, expresó.

Además, indicó que, aunque los hondureños acudieron a las urnas y expresaron su voluntad, el presunto fraude sistémico y sistemático —tanto virtual como físico— resulta “matemáticamente evidente”, pues los patrones numéricos registrados no corresponden a un comportamiento electoral natural.

“Desde el inicio hasta el final del proceso existe un patrón: 40.5 por ciento, 39.5 por ciento, 19.0 por ciento y 1.0 por ciento. ¿Cuándo ocurre eso? Cuando se manipula el código fuente del sistema operativo. ¿Es eso democracia? ¿Es honestidad?”, cuestionó.

Señaló también que, aunque los porcentajes permanecieron intactos desde el primer corte, la cantidad de votos sí varió, lo que —según él— evidencia una alteración intencional del sistema informático.

Ávila aseguró que existe una estructura que opera la manipulación digital, la cual sería capaz de redistribuir votos de un candidato a otro.

“Esta es una desorganización bien organizada. Una vez que se conoce el código fuente de la computadora, se puede manipular de forma tal que, si usted va de candidato y no es la persona que quieren, pueden decir: de cada cien votos de esta persona, trasládenle cincuenta a tal, veinte a tal y diez a tal. Eso es violar la voluntad del pueblo”, denunció.

Asimismo, cuestionó la drástica reducción del número de votos entre las elecciones primarias del 9 de marzo y las elecciones generales de algunos candidatos presidenciables, argumentando que los datos no corresponden a una variación normal.

“No les llama la atención que tres partidos dijeron que casi un millón de personas votaron por ellos en primarias y en las generales apenas suman doscientos o trescientos mil más. Porque hubo fraude desde las primarias y nunca se investigó”, sostuvo.

Finalmente, calificó las elecciones como inconstitucionales, al asegurar que la Constitución garantiza la inclusión, mientras que miles de hondureños en el exterior fueron excluidos por la falta de centros de votación en países como España, México, Canadá y Estados Unidos.

“No pudieron votar nuestros compatriotas en el exterior; eso demuestra que estas elecciones no solo son inconstitucionales, también son ilegales”, concluyó.

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