El abogado y titular de Aduanas de Honduras, Fausto Cálix, recordó que el rol de la presidenta Xiomara Castro es la gestión de los asuntos públicos, porque el poder es del soberano –el pueblo– que ha enfrentado sectores conservadores y élites políticas, económicas y criminales.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. El titular de la Administración Aduanera de Honduras (Aduanas), Fausto Cálix, recalcó que aunque el Partido Libertad y Refundación (Libre), esté hoy al mando del Gobierno, el poder real sigue estando en la sociedad que afronta otras fuerzas económicas, políticas y criminales que han sostenido la conspiración a los cambios para beneficio de todos.
Cálix recordó que esto no es un tema actual pues viene desde el golpe de Estado 2009 que dieron vida al Partido Libre y que, como nueva fuerza, fue boicoteada por ese orden enemigo del desarrollo en los fraudes electorales de 2013 y 2017, ejecutados por la estructura que doblegó a quien fuera presidente del extinto Tribunal Supremo Electoral (TSE), David Matamoros Batson.
El funcionario señaló que, en las elecciones generales de noviembre de 2021, la ciudadanía no enfrentó únicamente a figuras políticas tradicionales, sino a actores con vínculos directos o estrechos con el crimen organizado que, al perder la elección, iniciaron su plan para asaltar el nuevo Gobierno.
Además, enfatizó que estos sectores son quienes se oponen a la aprobación de reformas estructurales como la Ley de Justicia Tributaria, grupos que usan sus alianzas políticas en los partidos Nacional y Liberal, quienes históricamente han respondido a sus intereses económicos.
“El poder no lo tenemos nosotros”, recalcó Cálix, pues es claro que la presidenta Xiomara Castro, llegó únicamente como administradora de Gobierno, ente que administra los recursos públicos del Estado.
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