«Es el momento para que cualquier Estado que viole la soberanía de una embajada de otro país y viole el derecho de asilo, el derecho internacional, se le expulse de la ONU», subrayó el presidente de México, Andres Manuel López Obrador, al reafirmar la petición de expulsar a Ecuador del órgano mundial, según reporte de la agencia internacional, Sputnik.
Agencias / EL LIBERTADOR
Ciudad de México, 16 abr (Sputnik).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reafirmó este martes su petición de la expulsión de Ecuador de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por el allanamiento policial a su embajada en Quito el 5 de abril.
«Nosotros queremos que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) actúe, y es muy claro lo que estamos planteando: primero una separación del Estado de Ecuador de las Naciones Unidas, en tanto no se pronuncie ofreciendo un compromiso de no repetición, la aceptación de que violaron nuestra soberanía», dijo el jefe de Estado en conferencia de prensa, horas antes de una reunión virtual de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para tratar el caso.
López Obrador exigió además de una disculpa pública y promesa de no repetición por parte del país sudamericano, así como que quede establecido un procedimiento cuando esta situación se repita en otra parte del mundo.
«Nos importa también que no haya repetición en ningún caso. Es el momento para que cualquier Estado que viole la soberanía de una embajada de otro país y viole el derecho de asilo, el derecho internacional, se le expulse de la ONU», subrayó.
La policía ecuatoriana ingresó a la embajada de México en Quito el 5 de abril para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien se encontraba allí solicitando asilo.
El Gobierno de Daniel Noboa subraya que Glas había sido condenado por delitos comunes de corrupción (dos sentencias relacionadas con sobornos y con el caso Odebrecht) y estaba en libertad provisional, y por tanto no reunía los requisitos para el asilo y «de ninguna manera puede ser considerado como un perseguido político».
La postura del jefe del Ejecutivo mexicano en cuanto a Glas es defender el derecho de asilo.
«Los perseguidos por razones políticas deben de ser apoyados, protegidos por el derecho de asilo. Es parte de nuestra tradición de política exterior y eso se tiene que defender, es lo que estamos planteando», puntualizó.
Recordó además que ante la gravedad del allanamiento de su sede diplomática, el país norteamericano ya presentó una denuncia ante la CIJ, que continuará con ese trámite y que cualquier otra denuncia que se presente en ese sentido merece ser atendida.
«Si no se actúa así, la ONU va a quedar como un florero, nada más de adorno, y no se puede permitir que se rompa, que se vulnere el derecho internacional, como se hizo en el caso de Ecuador, porque sería la ley del más fuerte, el mundo de los gorilas», puntualizó.
La respuesta del mandatario fue hecha ante una pregunta sobre una denuncia por presunto «secuestro» de Glas, presentada por un diputado de la bancada oficialista del Movimiento de Regeneración Nacional ante la Fiscalía General mexicana, que el mandatario avaló. (Sputnik).
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