“Hay liberales corbata azul”, denunció firme el 30 agosto de 2014 Mauricio Villeda, entonces ya era “pajarito golpista”, después se hizo “pechito azul”, una década se fue y, ahora, el liberalismo subsiste como Sméagol entre la ataduras codiciosas de su cúpula y el ansia de un pasado cuando era poder y construía gobiernos siendo la segunda potencia política; el triste presente del Partido Liberal anuncia el final de la estrella solitaria, tras una década en acelerada decadencia, el futuro para sus dirigentes está pintado entre barrotes y overoles naranja.
“Esto no es cuestión de niños, es de Hombres”, resuena entre los salones en el Congreso, en medio de rabietas “Tommy”, Gladis, “Toño” y los otros y las otras, no hayan manera coherente de construir oposición, fueron “12 años pandoros” y desde el escritorio de Redondo ya se firmó la convocatoria, el nuevo Fiscal viene, nos vemos próximo martes para mirar otro eclipse o humo blanco, “nunca se sabe”, dijo nuestro querido “Chelato”.
Reflexión
EL LIBERTADOR
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Tegucigalpa. Hace muchas lunas y soles fueron un semillero de juventud talentosa, sentía a Honduras y alguna obra social quedó en la historia, y hoy, apenas un cementerio de vejestorios con recuerdos de “una vez…”; las milicias eternamente jóvenes se creyeron el cuento de la “Bella Durmiente” y así se quedaron, sin lo hermoso, pero en el sueño sin final, jamás regresaron (por la vía democrática) al poder central del país, lo demuestra cada elección que pasa, solo disminuyen su caudal, son apenas un movimiento de alcaldías.- En ese mismo espejo es donde el Partido Nacional se ve reflejado, en un escenario apocalíptico –claro– donde en la imaginación sobreviven al juicio que se asoma en la corte de Castel.
Ningún imperio se derrumba en un día, aunque ya el Partido Liberal no puede alcanzar siquiera una cantidad digna de diputados, aún hace una balanza y, lo que podría resultarle para capitalizarse y salir del fango, solo logra hundirse más en las arenas movedizas de la política vernácula.- Desde el golpe de Estado de 2009 asumieron su rol como un partido bisagra de los nacionalistas y en esa postura siguen hasta hoy, tenebrosos personajes visibles como Marlon Lara o el nefasto de Alfredo Saavedra, solo recuerdan esa conducta reptilesca que despedazó ese, hoy sí, partido; pero también están los liberales bajo la sombra, los que se acomodan y al abrir el diván siempre tienen lista la corbata azul, por si el negocio así lo requiere.- Astutos de lo nefasto que, por un poquito de poder, hasta mutan dentro de los “salvadores” o el “tonto útil” de turno.
Cuando un cuerpo fallece, aún se pueden recibir estímulos, aproximadamente unos 30 minutos.- Esa media hora de vida es la que se juega hoy el Partido Liberal, con una profunda crisis en los intestinos y un desprestigio público que a su cúpula hace mucho en verdad no interesa, mientras las bacterias invaden el cuerpo enfermo, sin defensas; como rémoras pegadas al cuerpo flotan en derredor sombríos personajes como “el patriota de las ZEDE”, José Luis Moncada; “Gata Moncada”, lo llamó la máxima autoridad liberal.- Pero ese proceso de decadencia, paradójicamente, los ha puesto en posiciones privilegiadas, entre el oficialista Partido Libre y Parido Nacional, éste apenas comienza a recibir lo que ya el Liberal tiene 14 años de experiencia: la vil llanura, dijo alguna rata vividora desde el lomo del pueblo hondureño.
Un grupo de dignos alcaldes se levanta en contra de la osamenta vegetativa representante mandamás en el Central Ejecutivo y como parte autónoma de un cuerpo se rebela y desnuda la triste realidad de la casa: nadie habita ahí, no hay orden, ni liderazgo, unos “compitas” que se ponen de acuerdo para ver qué ganan y que le pueden sacar al Gobierno de turno, y otros, cómo se salvan de la cárcel en alianza con los cachurecos en tembladera constante.- Pelean los ancianos por quién tiene menos arrugas y menos males de la vejez, muchos se quitan hasta los años para seguir diciendo que representan a la juventud eternamente joven ¡Dense paja, pue’!
La señal más clara es que ya ni siquiera son capaces de proponer soluciones, que tácticamente sería lo ideal para que la sociedad los reconozca como conciliadores; pero no, nada de eso, en la elección del fiscal se plegaron a la formula del Partido Nacional y peor aún, de Salvador Nasralla, que no llega siquiera a políticastro, prácticamente les marca el compás al que bailan, mientras gente como Yuri o Mario se muerden los labios en algún sucio curul dentro del hemiciclo; por eso es incomparable la postura de los alcaldes que al menos se mueven y gritan ¡Seguimos vivos! ¡Caminemos fuera del Partido Nacional! ¡Propongamos como liberales!
Es natural dentro de la aberración que, como un cuento de Kafka, tenebroso y espectral, los corruptos se aferren al último eslabón de la cadena que les puede proporcionar impunidad, ese lugar tibio que les recuerda al vientre seguro de la madre, como una alusión a Freud, pero esa etapa llegó a su fin y no son capaces de verlo o comprenderlo, o simplemente no conviene en sus neuronas retorcidas. Por eso los delincuentes son capaces de unirse cuando tienen un objetivo que perseguir, que en este caso es no terminar como Ana, hablando burradas, los criminales saben que, si los descubren, ni el teléfono les suena o como una llamada que no termina de caer, las invitaciones terminan y alguien apaga la música de fondo “… Soy el papá de los pollitos…” o algo así.
Por eso Héctor Zelaya, encuentra el punto de dolor de Tommy, cuando logra ver encima del mensaje de odio que la verdadera razón del azul de comportarse de esa manera es miedo: “Esto no es cuestión de niños, es de Hombres, así que apriétela y no le tenga miedo a rendir cuentas de sus cuestionados 12 años Pandoros, ¡dejen de bloquear la elección del Fiscal!”. Pero esas palabras no resuenan solo en la cabecita de Tommy ¿Cuántos más se sienten identificados? ¿Qué siente Gladys Aurora?, por ejemplo, personaje agrio en el paladar de la ley y en las páginas negras de la historia en este país y que se la ha pasado entre las sombras, entre arrugas y amarguras, la gente todavía recuerda su trasero encima de comida para su pueblo indígena; o qué piensa “Toño” y sus elocuentes audios ¿A qué periodista llamará? Así la fila, es extensa entre liberales y nacionalistas.
Aquí olvídate de Comte o Immanuel Kant, menos hablar Jacques Rousseau, Montesquieu, Diderot, Voltaire, Adam Smith, el Estado es solo ha sido un grupito de mafiosos analfabetas y agringados en su mayoría que tiene encerrado al hondureño en una cárcel a cielo abierto, como los israelitas lo hacen con el pueblo palestino; para estos brutos de convento el imperio de la ley, la división de poderes, los derechos y libertades fundamentales o la legalidad de las actuaciones de la administración y control judicial de las mismas, son solo cuentos de hadas para niños o ilusos.
Este juego en el que nos han llevado donde la corte se ha repartido como un pedazo de pastel en feria se les va a terminar, no olviden la lección que los hondureños terminaron con un bipartidismo de más de 100 años en menos de 12.
Postdata: Obviamente a los medios de comunicación tradicionales también les conviene que el control de la justicia esté en manos de corruptos, cuentan las leyendas que las salas de redacción de los que tienen “mayor credibilidad”, “la verdad en sus manos” y otras pendejadas iguales, se quedarían sin sus dueños, sin sus banquitos, directores ni jefes de redacción, ni coordinadores, si Themis actúa… ¡Fumen malandrines! Avanti
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