Renta de vehículos blindados, excesivo personal de seguridad, almuerzos gourmet y protección hasta para familiares de una “red interna de corrupción”, han sido algunos de los hallazgos presentados por el nuevo Congreso sobre la gestión de los últimos cuatro años de Mauricio Oliva como presidente de ese poder del Estado que, han costado al pueblo más de 2,900 millones de lempiras.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Esta mañana el presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, ha dado a conocer a la población hondureña un informe de gestión de los primeros meses del nuevo periodo 2022-2026, donde destacó un análisis financiero que evidenció el derroche de casi 3,000 millones de lempiras.
El informe nombrado: “¿Cómo lo encontramos? ¿Qué hemos hecho? ¿Hacia dónde vamos?”, ha revelado las pésimas condiciones en que arrancó la nueva gestión legislativa debido a los abusos del anterior presidente de ese poder, Mauricio Oliva, exdiputado del Partido Nacional.
Según el reporte, Oliva autorizó rentar 70 vehículos para su seguridad especial, misma que abarcó incluso beneficios a sus familiares y algunos allegados que significó pagar hasta 10,000 lempiras mensuales a personas que no laboraban en el Congreso.
Mensualmente, expuso Redondo, el Legislativo gastaba 10 millones de lempiras para cuidar a “diputados VIP” con vehículos para protección y, se constató que la gerencia de Recursos Humanos, a cargo del abogado Nery Galo, extendió contratos de trabajo con plaza permanente a 1,270 personas que generaron una planilla excesiva de 25 millones de lempiras mensuales.
“La gestión del Partido Nacional llegó a pagar L 91 mil en almuerzos para 64 personas, a un precio L 1400 cada plato, destinados a una reunión que nunca se realizó en el Congreso Nacional, pero sí en una reunión privada en una casa particular”, apunta el informe.
Entre lo más relevante, la Gerencia de Tecnología del Legislativo, encontró también que varios contratos de renovación fueron sobrevalorados por 1.65 millones de lempiras mensuales, pero los servicios nunca fueron aplicados, además de otros gastos innecesarios que sólo nutrieron la “dolce vita” de parlamentarios afines a la dictadura.
Deja un Comentario