La quiebra financiera que dejó la administración Hernández, no ha permitido que en los primeros 47 días del Gobierno de Xiomara Castro, se pueda ver resultados y políticas públicas concretas, por ello, a criterio del analista hondureño, Raúl Pineda, se le deberá otorgar un año para darle forma a la nueva administración que tomó posesión el pasado 27 de enero.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. Por tradición, en los primeros 100 días un gobierno debe presentar cambios en la sociedad que marcarán el rumbo de su planificación en políticas públicas. Pero este anhelo, en la práctica, durante muchos periodos presidenciales ha quedado relegado a la imaginación, acción que también se ha repetido en los primeros 47 días de la actual administración de Xiomara Castro.
En este caso, la dictadura del Partido Nacional durante 12 años fue creando una serie de crisis en la sociedad hondureña que ahora desemboca en la realidad del nuevo mandato; el régimen de Juan Hernández saqueó las arcas del Estado y heredó a la oposición un país endeudado, en la bancarrota total, ya que durante todo ese tiempo operó con base en excesivos préstamos de organismos internacionales.
Al respeto, el destacado profesional del derecho y respetable analista político y social, Raúl Pineda, mencionó en entrevista con EL LIBERTADOR que el actual Gobierno no ha arrancado todavía en la forma que esperaba la sociedad, pero que este hecho debe ser visto con comprensión y tolerancia, por dos razones: “es un Gobierno que tenía 12 años fuera de la administración pública y la crisis es tan grande que es difícil ordenar todo un sistema administrativo que funcionaba a base de préstamos de organismos de financiamientos internacionales”.
El togado desglosa que una de las causas de la crisis económica que afronta el país es que la administración del Juan Orlando Hernández, -señalado por la justicia norteamericana por fuertes vínculos con el narcotráfico-, les brindo fuertes aumentos a sus funcionarios, dañando con esta medida el erario; además, antes de finalizar su gobierno les pagó jugosas prestaciones.
“debe haber una reducción drástica de los casi 300 mil empleados que tiene la administración pública, el gobierno no puede ser tan obeso, es más, se trata de poner en forma al gobierno”, destacó el togado, ante la crisis económica que afronta el país y la falta de “arranque” de la actual administración Castro.
Para el profesional del derecho, uno de los primeros pasos para que exista un punto de partida de la actual administración es que debe identificarse un liderazgo, ya que no puede existir un “gobierno con dos cabezas”, por lo que se debe hacer un lado el liderazgo de Manuel Zelaya Rosales y la presidenta Xiomara Castro dirigir la nación.
“El gobierno tendrá que ser objeto de señalamientos y críticas al menos pasado un año de la toma de poder de la señora Castro, en un año debe reconstruir las piezas incluyendo la de la oposición, la oposición tiene un papel importante para un buen gobierno y que se refiere al cumplimiento de las promesas de campaña”, reflexiona el jurista.
Asimismo, relató que la presidenta Castro debe saber administrar los recursos limitados que dejó la dictadura de JOH, igualmente, el país en los últimos años tuvo al frente un grupo de delincuentes, pues el ex gobernante y el director de la Policía Nacional van a ser juzgados por narcotráfico en los Estados Unidos, lo cual calificó como una “vergüenza nacional”.
Pineda, recomienda al actual gobierno que en diciembre y cada año se presente un informe de los resultados reales y logros obtenido durante ese lapso de tiempo, con el fin de mantener la confianza del pueblo hacia las autoridades.
“La población tiene un papel fundamental en el desarrollo del país, ya que pasó el tiempo de la bolsa solidaria y las personas no deben quedarse esperando que se les provea la misma, el desarrollo del país está en la oportunidad de empleo y que los individuos se conviertan productivos laborables y económicos”, concluyó el reconocido analista.
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